Balance de los bloqueos en Bogotá por el paro de camioneros

Este jueves 5 de septiembre de 2024, el Distrito de Bogotá entregó un detallado balance sobre las afectaciones ocasionadas por el paro de los gremios de transportadores y camioneros que ha impactado severamente la movilidad y la vida diaria en la ciudad. 

Durante tres días consecutivos, la capital ha enfrentado múltiples bloqueos en puntos críticos, lo que ha generado caos en varios sectores y una profunda preocupación en las autoridades locales.

La secretaria de Movilidad, Claudia Díaz, destacó que las localidades más afectadas han sido Ciudad Bolívar, Usme y Usaquén, donde los bloqueos se han mantenido de manera permanente. 

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Impacto en la movilidad y la economía:

El Sistema de Transporte Masivo TransMilenio ha sido uno de los principales afectados. Hasta las 7:00 a. m. de este jueves, se registraron 17 puntos de bloqueo activos, con la participación de más de 600 vehículos, lo que ha repercutido en la movilidad de 4.059.000 usuarios. Además, la Terminal de Transportes de Bogotá se ha visto obligada a suspender la venta de tiquetes, lo que ha impactado tanto a los viajeros como a las empresas de transporte.

El alcalde Mayor de Bogotá, Carlos Fernando Galán, hizo un llamado urgente al gobierno nacional para alcanzar un acuerdo con los manifestantes o permitir la intervención de la fuerza pública para despejar las vías:

 "Esto no da más espera, no puede pasar de hoy la decisión de llegar a un acuerdo o bien permitir que la fuerza pública pueda proceder a levantar los bloqueos para garantizar la movilidad y los derechos de la población que se ha visto afectada", expresó el mandatario. 

Hasta el momento, tres personas han sido capturadas en flagrancia, y 73 vehículos del Sistema de Transporte Público han sido vandalizados, afectando aún más el servicio en la ciudad.

Además de la movilidad, la actividad económica de Bogotá también ha sufrido importantes consecuencias. Se estima que el paro genera pérdidas diarias de aproximadamente 30.000 millones de pesos, afectando sectores como la hotelería, el transporte y los restaurantes.

En cuanto al abastecimiento de alimentos, Corabastos, la central mayorista más grande de la ciudad, ha recibido solo el 55% de los productos que usualmente entran a diario, lo que ha generado un incremento promedio del 20% en los precios de la canasta familiar, especialmente en productos provenientes de la vía al Llano.

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Otros efectos colaterales:

La educación tampoco ha escapado a las afectaciones del paro. Más de 724.000 niños de colegios oficiales no han podido asistir a clases desde el miércoles, aunque las instituciones distritales han dispuesto de puntos para la entrega de refrigerios del Plan de Alimentación Escolar (PAE), y las clases serán repuestas el 17 de septiembre.

En cuanto a la recolección de basuras, más de 270 toneladas no han podido llegar al relleno sanitario Doña Juana. Las localidades de Fontibón, Kennedy y Engativá son las más afectadas por la acumulación de desechos, lo que podría derivar en problemas de salud pública si el paro continúa.

El suministro de gasolina también está bajo presión, con un abastecimiento suficiente solo para los próximos 4 a 6 días, según reportó la Secretaría de Desarrollo Económico (SDDE). A esto se suma la paralización de proyectos de infraestructura en la ciudad, debido a la falta de suministro de materiales, lo que agrava aún más el panorama de incertidumbre.

A pesar del despliegue de esfuerzos por parte de las autoridades locales, la situación generada por el paro de transportadores ha dejado a Bogotá en una coyuntura crítica. El balance de tres días de protestas resalta no solo el impacto en la movilidad, sino también en la economía, la educación y la calidad de vida de los ciudadanos.