Nueva Ley de Donación de Alimentos en Colombia: Ventajas para empresas y beneficios sociales

Colombia ha dado un paso significativo hacia la reducción del desperdicio alimentario y la mejora de la seguridad alimentaria con la reciente aprobación de la Ley de Donación de Alimentos. Esta normativa, diseñada para incentivar la donación de excedentes alimentarios por parte de las empresas, busca transformar la forma en que se gestionan los alimentos que, en lugar de ser desechados, pueden beneficiar a las personas que más lo necesitan.

Beneficios para las empresas y la comunidad

La nueva ley tiene como objetivo principal ofrecer ventajas fiscales a las empresas que se sumen a esta iniciativa. Las compañías que participen en el programa de donación podrán disfrutar de importantes deducciones en impuestos. 

Según la representante a la Cámara Saray Robayo Bechara, del Partido de La U y ponente de la iniciativa, esta medida no solo ayudará a reducir la carga tributaria de las empresas, sino que también promoverá una cultura de responsabilidad social y sostenibilidad.

Por consiguiente, el articulado establece un descuento del 37% al impuesto de renta del valor donado, en el año o período gravable, a bancos de alimentos sin ánimo de lucro, iglesias reconocidas y a asociaciones de bancos de alimentos.

Además, la ley delimita un marco legal claro que facilita el proceso de donación. Al proporcionar un conjunto de directrices que regulan cómo deben manejarse y transportarse los alimentos donados, se busca asegurar que los productos lleguen en condiciones óptimas a quienes los reciben, minimizando riesgos y garantizando la calidad.

Impacto Social

Robayo asegura que con esta nueva ley en marcha se espera aportar cerca de $7,3 billones anuales en beneficio social y si se logra recuperar entre el 5 al 10% de la comida que normalmente se desperdicia, alrededor de 10 millones de colombianos podrían verse beneficiados y salir de la hambruna. 

Ahora bien, según explicó la representante, esta ley no solo incluye los alimentos aptos para el consumo humano, sino que también aplica para los elementos de aseo que, como factor adicional, estarán exentos del IVA, debido a que lo que en realidad se busca con la ley es que se contribuya a la dignifica la vida de los colombianos en situación vulnerable.

Esta normativa promete transformar el panorama de la gestión alimentaria en el país, generando un impacto positivo tanto en la comunidad como en el medio ambiente.