Continúa la preocupación por el riesgo de desabastecimiento de insulina en el país

En Colombia, la preocupación por el riesgo de desabastecimiento de insulina continúa en aumento. En las últimas horas, el Ministerio de Salud ha explicado la situación actual de disponibilidad de este medicamento, que es vital para los pacientes diabéticos.

El Ministerio de Salud ha explicado que de las nueve insulinas que se comercializan en el país, tres están en la lista de INVIMA debido a cambios en su disponibilidad, dos están en seguimiento permanente, Lispro y Degludec; y una en riesgo de desabastecimiento, la Glargina.

Sanofi, uno de los laboratorios productores de insulina a nivel mundial, ha comunicado que se han presentado demoras en la cadena de envíos desde Alemania, lo que ha afectado el suministro en Colombia.

Ante la escasez, varias familias y pacientes se han reunido en busca de alternativas, como Eber Gutiérrez, padre de un paciente con diabetes, expresando que: "La diabetes es una enfermedad muy dura, es muy cara y es una enfermedad que no da espera".

Alexandra Gómez, directora de la Fundación Asubimpro, mencionó que desde la semana pasada se han incrementado los casos de personas que se han descompensado por la falta de entrega de insumos.

Pacientes como Paula Ramírez, diagnosticada con diabetes desde los 3 meses de nacida, depende de una bomba difusora de insulina y se ve afectada al no encontrar suficiente suministro de este medicamento. Su madre, Diana Velandia, entregó un testimonio sobre el caso de su hija: "Mi hija hace año y medio tuvo una hipoglucemia severa que la llevó a convulsionar por 40 minutos. La bomba nos ayuda a percibir porque ella es asintomática en cuanto a hipoglucemia".

Otros usuarios, además de enfrentar la falta de insulina, deben lidiar con los altos precios del tratamiento. Lizeth Almonacid, paciente menor de edad con diabetes, comentó: "Es muy grave por lo que estamos pasando nosotros los niños diabéticos, no solamente por la escasez de insulina, sino que por lo menos yo que uso el freestyle tengo que tener sensor por mi jornada académica que es muy larga y la eps no nos lo da, el aparato vale como $220.000, lo mismo el sensor y las tiras valen $150.000. Entonces es una renta muy grave”.

La endocrinóloga Dilcia Luján, de la Asociación Colombiana de Diabetes, afirmó que estos pacientes no pueden dejar pasar ni siquiera tres días sin aplicarse la insulina, ya que pone en riesgo su vida . Sin insulina, el cuerpo tiene aproximadamente una semana para vivir, lo que hace que la situación sea aún más crítica para los pacientes con diabetes tipo 1.

“Podemos detectar tres razones principales que son las causas de esta situación. La primera es la tensión financiera que hoy por hoy tiene el sistema de salud en Colombia; la segunda son los problemas de disponibilidad de materias primas y logística a nivel mundial y la tercera son los problemas regulatorios y los represamientos qué hay por parte del INVIMA para el ingreso de este tipo de terapias en Colombia “, señaló Erika Montañez, directora de la Fundación 'Voces Diabetes Colombia'.

En el país, solo hay dos grandes farmacéuticas que fabrican las nueve insulinas que se comercializan, por lo que al tener problemas con una de ellas, se afecta toda la cadena de suministro. Respecto al producto Lispro,el Ministerio aseguró no haber recibido respuesta del titular que la comercializa, sobre la Insulina Glargina su titular de registro sanitario que es Sanofi, comunicó que hubo demora en la cadena de envío, sin embargo, se prevé que habrá reservas próximamente.

Por David Bautista Dorado.