La Generación eureka y los protagonistas de Pisando fuerte: un gran parche unido por el cambio
En el ecobarrio Ciudadela Colsubsidio de Bogotá, junto al Humedal Juan Amarillo se encuentra la Huerta la Resiliencia, el lugar en el que el 18 de junio se llevó a cabo el encuentro entre la Generación eureka y algunxs de lxs protagonistas de Pisando fuerte, la serie que llegará en julio a nuestra pantalla. A propósito del estreno de esta gran serie, en julio estaremos hablando sobre el poder colectivo transformador, y para eso quisimos unir a dos parches poderosísimos, de chicxs que han descubierto que participar lxs hace poderosxs y mucho más cuando lo hacen juntxs, porque todo es #MejorEnParche.
¿Qué hicimos?
La Huerta la Resiliencia es un lugar que nació y creció gracias a un grupo de chicxs que junto a la comunidad decidió unirse en el año 2018 durante una serie de protestas por la construcción de un mega parque en los límites del humedal Tibaguya y al interior del ecosistema Juan Amarillo. Este lugar que surgió con el objetivo de cosechar alimentos que puedan beneficiar la calidad de vida de los habitantes de la localidad de Engativá, en el barrio Ciudadela Colsubsidio, poco a poco se ha convertido en todo un escenario de arte y aprendizaje, que les ha permitido crecer como las semillas que ellxs mismxs siembran. Este grupo de chicxs, gracias a su gran ejemplo y capacidad, se convirtieron en lxs protagonistas de uno de los capítulos de nuestra serie Pisando fuerte, que muy pronto podrás ver.
Al llegar nos recibieron con los brazos abiertos. Primero rompimos un poco el hielo, nos presentamos e hicimos un recorrido por la huerta, donde lxs chicxs de la Generación eureka tuvieron la oportunidad de ver qué se siembra allí (papa, mazorca, zuccini, cilantro, laurel, aguacate, uchuva), hacer preguntas sobre el proceso y estar en contacto directo con la naturaleza. Luego entre todxs hicimos una paca digestora, que es un sistema amigable con el medio ambiente, para usar los residuos orgánicos y transformar los desechos en tierra fértil. La actividad consistió básicamente en poner una capa de ramitas, otra de hojas secas, otra de residuos orgánicos (que lxs chicxs llevaron) y luego pisar y pisar, al ritmo de la música y el baile que no faltaron.Algo súper interesante de Pisando fuerte, es que lxs chicxs protagonistas hicieron parte del proceso de realización grabándose ellxs mismxs, y ese mismo ejercicio lo hicieron lxs chicxs de Generación eureka, hicieron una serie de preguntas y entrevistaron a las personas de la huerta para conocer un poco su proceso, partiendo del contexto actual: Lauren: ¿Teniendo en cuenta que mañana son las elecciones presidenciales, cuál es el cambio que tu esperas que haga este presidente para ayudar a preservar y cuidar el medio ambiente y los lugares como este?
La persona que nos gobierne y que tenga un diálogo con la comunidad como lo hacemos nosotros, debe venir a conocer este territorio y saber que hay una fauna y flora maravillosa que hay que preservar. Ahorita se está desarrollando un proyecto que va en contra de la vida, es importante que esa persona sepa que necesitamos alimentarnos, tener lazos y tejidos comunitarios muy fuertes, que la cultura nos ayuda muchísimo para este proceso.
Sara: ¿Qué tipo de capas puede tener una paca?
Puede tener varias capas, la primera son palitos y ramas medianas, luego hojarasca, luego residuos orgánicos, luego se pisa y luego puede hacerse otras capas.
Para finalizar realizamos un compartir de alimentos, en el que cada persona llevó algo (con el reto de no generar residuos o uso del plástico) como regalo para lxs demás (como Sara que quiso entregarles semillas de Granadilla. Luego como estreno oficial de Pisando fuerte vimos el capítulo juntxs sobre el Colectivo Huerta la Resiliencia y al final lxs protagonistas compartieron sus experiencias e incluso Carol entrevistó a Claudia, la Directora de la Serie.
¿Qué quedó de esta experiencia?
- La inspiración es algo que nos motiva también a hacer las cosas mejor y eso fue lo que sucedió cuando lxs chicxs de la huerta nos mostraron la pasión con la que hacen su labor. ¡Nos inspiramos!
- Entre preguntas y respuestas, todxs aprendimos muchísimo sobre la huerta y su importancia para el medio ambiente, y sobre todo a entender que desde nuestras casas también podemos generar grandes acciones.
- El baile, la música y el arte también nos conectan y nos ayudan a compartir e intercambiar experiencias.
- El valor del voluntariado: entender que su labor allí es voluntaria, que cada uno disfruta lo que hace y prefieren estar en la huerta haciendo una paca o cultivando que haciendo cualquier otra actividad porque saben que están TRANSFORMANDO su territorio y a la comunidad.
- Generosidad: los chicxs compartieron con nosotrxs todo su conocimiento y respondieron todas las preguntas que les hicieron los chicos de la GE. Además llevaron música, baile y dos personajes que nos acompañaron durante la jornada.
- Resiliencia: a pesar de las adversidades, los chicxs de la huerta han seguido adelante, volviendo a empezar cada vez que lo han tenido que hacer.
- Trabajo en equipo: No solo entre ellos sino también entre las huertas del sector: Huerta del sol, Huerta Quinzata, Huerta Tibaguya.
- Desaprendizaje: cambiar el chip de lo que nos han enseñado, por ejemplo que las papas deben ser perfectas, que los únicos que tienen que comer son los humanos, darle valor a cada animal que está en la huerta y que también necesitan comer. Dentro de la ciudad también se puede tener un espacio natural y conexión con la tierra, contrario a lo que muchas personas dicen que tienen que irse al campo para tener este tipo de espacios. “¡Está en nuestras manos hacer de esta ciudad un lugar más verde y sostenible!”
Ahora solo nos queda agradecer a lxs chicxs del Colectivo Huerta La Resiliencia, por permitirnos conocer su espacio, por contarnos su experiencia y demostrarnos que cuando nos unimos podemos ser cada vez más fuertes y que todo es mejor en parche.