El 46% de los comerciantes en Bogotá se sienten inseguros según un estudio de Fenalco

Según una encuesta reciente realizada por la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), el 46 % de los comerciantes en la capital manifiestan no sentirse seguros en las localidades donde desarrollan su actividad. 

A pesar de esta percepción, las denuncias formales ante las autoridades han disminuido, lo que refleja una desconexión entre la experiencia de los comerciantes y las acciones que toman para protegerse.

Uno de los datos más significativos es que 77 de cada 100 víctimas no denuncian los delitos que sufren. Entre las razones principales que argumentan los comerciantes se encuentran la demora en los trámites de denuncia y la escasa judicialización de los delincuentes. Estos factores desmotivan a las víctimas, que sienten que no obtendrán una respuesta adecuada por parte de las autoridades.

Sin embargo, los datos reflejan una leve mejoría en cuanto al número de comerciantes que aseguran haber sido víctimas de algún delito. En agosto de 2023, el 36 % de ellos reportó haber sido afectado por la delincuencia. Esa cifra descendió al 34 % en febrero de 2024 y, según la última medición realizada en septiembre, cayó al 23 %. Aunque la reducción es notable, el miedo y la sensación de inseguridad persisten en gran parte del gremio.

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Sectores más afectados

Las localidades de Engativá, Chapinero, Usaquén y Kennedy, que concentran gran parte de la actividad económica de la ciudad, son también las más afectadas por delitos contra los comerciantes. Estos sectores se caracterizan por un elevado flujo comercial y una constante interacción entre clientes y negocios, lo que aumenta el riesgo de delitos.

¿Cuáles son las modalidades de robo más comunes?

En los últimos seis meses, el robo en sus diversas modalidades ha seguido afectando a los comerciantes. Las formas más comunes de hurto en los comercios bogotanos son el raponazo, que representa el 26 % de los casos reportados, y el robo a mano armada, con un 17 %. Estos delitos generan no solo pérdidas económicas, sino también una sensación de vulnerabilidad y temor en los dueños y trabajadores de los establecimientos.

Aumento de la extorsión:

Un fenómeno particularmente preocupante en varios sectores de la ciudad es el aumento de la extorsión, que ha experimentado un crecimiento significativo. Este delito afecta directamente a la economía de los negocios, que se ven obligados a pagar sumas de dinero a cambio de protección o para evitar daños a su patrimonio.

Ante esta situación, los comerciantes bogotanos han solicitado acciones más contundentes por parte de las autoridades locales. A pesar de la disminución en la cantidad de delitos reportados, la falta de confianza en el sistema de justicia y las largas esperas para presentar denuncias continúan desmotivando a las víctimas. 

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Fenalco ha hecho un llamado para que todos los comerciantes se animen a denunciar cualquier tipo de delito que sufran, ya que solo de esa forma se podrán tomar las medidas necesarias para mejorar la seguridad en la ciudad.