Bogotá tiene menos de 20 años de agua garantizada: asegura la CAR

Alfred Ballesteros, director de la Corporación Autónoma Regional (CAR), ha alertado sobre la situación crítica del agua en Bogotá. Esto se da en medio del racionamiento de agua en la capital y de las medidas que se han venido implementando para que los niveles de los embalses que abastecen de agua a la ciudad aumenten. Según estudios realizados en conjunto con la Universidad Nacional de Colombia, la capital colombiana cuenta con agua garantizada solo hasta 2040 debido a la degradación de los ecosistemas que proveen este recurso vital.

Vulnerabilidad de los ecosistemas que proveen agua

Los estudios indican que los ecosistemas encargados de la producción de agua en Bogotá son altamente vulnerables al calentamiento global y al cambio climático. Alfred Ballesteros enfatiza que los páramos, las "fábricas de agua" más importantes, podrían desaparecer para el año 2040 si no se toman medidas urgentes.

“Podríamos llegar a perder nuestros páramos, que son las fábricas más importantes de agua, en el año 2040. Los ecosistemas hoy están degradados, se ha ampliado la frontera agrícola y la situación es bastante crítica frente a la necesidad de garantizar seguridad hídrica para los habitantes de Bogotá y la sabana”, afirmó Ballesteros.

Urgencia de recuperación de microcuencas y compra de predios

Según estos indicadores, Bogotá tendría menos de 20 años de garantía de agua. Ballesteros asegura que es urgente que se hagan inversiones de manera conjunta para recuperar las microcuencas abastecedoras, adquirir predios de importancia ambiental y trabajar con las comunidades que están asentadas en esta zona.

“No podemos trasladar únicamente la responsabilidad a los ciudadanos, por supuesto que hay que ahorrar recursos hídricos en nuestra casa, pero esto no va a solucionar la crisis de agua. Tenemos que devolverle a estos ecosistemas la capacidad abastecedora para que tengamos oferta hídrica en el mediano y largo plazo”, aseguró el director de la CAR.

Para Ballesteros es vital priorizar la compra de predios, generar corredores ecosistémicos entre el páramo de Guacheneque, donde nace el río Bogotá, el páramo de Chingaza y el páramo de Sumapaz.

“Por otro lado el páramo de Guerrero, Guargua, Laguna Verde que son los que son todos los que alimentan nuestros sistemas de embalses. Adicionalmente hay que restaurar estas zonas (…) se requieren inversiones que la CAR estima de 5 billones de pesos en los próximos 20 años", añadió. 

Delimitación de las fábricas de agua

Uno de los problemas principales en la protección de los páramos y fábricas de agua es la delimitación de estos territorios. Aunque existen leyes que protegen y delimitan estos ecosistemas, la mayoría de los predios son privados, y las decisiones judiciales permiten a los campesinos realizar sus actividades ancestrales, lo que contribuye a la degradación.

“Cuando la actividad ancestral es la siembra de papa o la ganadería, contamina y afecta (…) Todos nuestros páramos están devastados, las coberturas nativas que hoy nos quedan se limitan a los predios que son de la propiedad del Estado”, agregó el director de la CAR.