En el Día Mundial del Peatón el INCI alerta sobre el peligro de las vías para personas con discapacidad visual

Este 17 de agosto, mientras Bogotá conmemora el Día Mundial del Peatón, una fecha que resalta la importancia de respetar los espacios destinados a quienes transitan a pie, los desafíos en la infraestructura vial de la ciudad se hacen más evidentes que nunca. Pese a los esfuerzos realizados, con más de 4.000 metros cuadrados de espacio público intervenidos este año, el estado de las vías y andenes sigue siendo motivo de preocupación para los habitantes, especialmente para aquellos con discapacidad visual.

El Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) ha revelado cifras alarmantes: el 42 % de los andenes en Bogotá están en regular o mal estado, lo que se traduce en más de 11 millones de metros cuadrados de superficies intransitables. Las localidades de Mártires, Puente Aranda, Kennedy y Usaquén presentan las peores condiciones, convirtiendo lo que debería ser un paseo seguro en un verdadero desafío.

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Para las personas con discapacidad visual, la situación es aún más complicada. El Instituto Nacional para Ciegos (INCI) ha hecho un llamado urgente a las autoridades y a la ciudadanía para cuidar y preservar los elementos que facilitan su movilidad. Aunque se han instalado baldosas podotáctiles en algunos puntos de la ciudad y se están implementando semáforos sonoros, estas intervenciones no son suficientes para garantizar la seguridad de esta población.

"El derecho a la movilidad es fundamental, y los andenes podotáctiles o los semáforos sonoros buscan disminuir el riesgo de los peatones ciegos. Sin embargo, la ciudadanía debe ser consciente y respetuosa de estos elementos, evitando su deterioro y usándolos correctamente", señaló el doctor Carlos Parra Dussan, director general del INCI.

En un entorno donde los huecos, desniveles y la falta de señalización son el pan de cada día, los peatones de Bogotá, en especial aquellos con discapacidades, enfrentan riesgos constantes. Las imprudencias de otros actores viales, como motociclistas que invaden los andenes, agravan aún más la situación.

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El INCI, en el marco del Día Mundial del Peatón, no solo resalta la importancia de estas intervenciones, sino que también insta a la ciudadanía a adoptar comportamientos responsables. Entre las recomendaciones se incluyen reducir la velocidad al acercarse a personas con bastones o perros guía, respetar las zonas podotáctiles y ofrecer ayuda para cruzar la calle de manera segura.

Bogotá necesita una infraestructura vial que sea inclusiva y segura para todos. Es crucial que las autoridades sigan trabajando en la construcción de ciudades accesibles, pero también que la ciudadanía asuma un rol activo en el cuidado y respeto de los elementos que garantizan la movilidad segura de las personas con discapacidad visual.