Se relanzó el Centro de Encuentro para la Paz y la Integración Local en Suba: ¿cómo funciona?
En una zona esquinera del corazón de la localidad de Suba hay una reja que divide la avenida de un inmenso jardín delantero. En este lugar hay varias materas artesanales a modo de huerta y un mural en construcción que atraviesa buena parte de una de las paredes interiores: sobre este muro se crea un ecosistema con todo tipo de formas de vida y con colores verdes, azules y blancos como protagonistas. Quienes pasan por el sitio pueden pensar que se trata de un colegio muy bien organizado, o un centro comunal considerablemente amplio, incluso un espacio para eventos y convenciones u otro tipo de reuniones.
Pero ese es el Centro de Encuentro para la Paz y la Integración Local de Víctimas del Conflicto Armado, espacio que se relanzó este miércoles con varias actividades y un mensaje relacionado con la paz, el perdón, la reconciliación y las segundas oportunidades.
Le puede interesar: El 9 de abril se conmemora el Día nacional de la memoria y solidaridad con las víctimas
¿Qué pasa al interior del Centro de Encuentro para la Paz?
Este espacio, ubicado en el barrio La Gaitana, no tan cerca al portal de TransMilenio de la localidad de Suba pero tampoco tan lejos, hace parte de una estrategia de la Secretaría de Integración Social relacionada con el apoyo, la asesoría y la ayuda a las víctimas del conflicto armado del país.
“Se implementan estrategias locales que permiten materializar la atención, asistencia, reparación integral y prevención temprana con esta población”, se indica en la página oficial de Integración Social.
El Centro de Encuentro para la Paz traza un perímetro de apoyo público dado que, en diagonal, está una de las Casas de la Sabiduría, espacios destinados al acompañamiento de los adultos mayores de la ciudad.
El relanzamiento del Centro de Encuentro para la Paz trajo consigo diversas iniciativas como la consolidación de ofertas laborales para víctimas del conflicto armado, fortalecimiento de los servicios de apoyo y el acompañamiento por parte de profesionales para la integración en ámbitos como la salud, la educación y la empleabilidad.
El horario de atención del Centro es de lunes a viernes, de 7 a.m. a 4:30 p.m., y cuenta con personal especializado para que las víctimas se acerquen con sus inquietudes de todo tipo dado que, si bien es un espacio ligado de forma directa con Integración Social, también cuenta con apoyo de la Personería, Secdesarrollo, Sechabitat e incluso el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena).
La página principal de la Secretaría de Integración indica que, si bien no se permite el acompañamiento de quien desee entrar al Centro, hay tres excepciones: cabezas de hogar que no pueden dejar a sus hijas o hijos; personas mayores o en condición de discapacidad y víctimas que por primera vez ingresan a la ruta de Ayuda Humanitaria Inmediata establecida por la Unidad de Víctimas.
“El otorgamiento de ayuda o atención humanitaria inmediata, se realiza a todas aquellas personas que llegan o residen en la ciudad de Bogotá y que manifiesten haber sido desplazadas con ocasión a un hecho victimizante a causa del conflicto armado y se encuentren en situación de vulnerabilidad”, indica el Distrito.
El conflicto armado también es una realidad en Bogotá
Debido a la gran cantidad de colombianas y colombianos que suelen llegar a la capital tras el desplazamiento u otros hechos relacionados con el conflicto armado, las entidades distritales tienen diversos mecanismos para conocer, en cada caso, el proceso más óptimo de integración o de retorno a territorio, para saber si es necesaria una articulación gubernamental.
El Observatorio Distrital de Víctimas del Conflicto Armado, creado bajo el Decreto Distrital 531 de 2015, tiene como objetivo hacer seguimiento de la situación de víctimas en la capital. Su último informe, que reseñó a nivel demográfico la cantidad de víctimas a mediados de 2023, indicó que había poco más de 860 mil víctimas en Bogotá, de las cuales alrededor de 370 mil ya estaban en un proceso consolidado de reubicación.
Este tipo de estudios y distinciones es posible gracias al Registro Único de Víctimas, sistema creado para contabilizar y apoyar a quienes han padecido las consecuencias del conflicto armado. En este enlace puede consultar la documentación y la normativa.
En todo caso, teniendo en cuenta la volatilidad de las cifras exactas, el Centro de Encuentro para la Paz en Suba es tan sólo uno de los ocho espacios dispuestos para la atención de quienes lleguen a la capital a raíz de la guerra. Los otros están en Chapinero (calle 63 # 15-58), Rafael Uribe Uribe (calle 22 sur # 14A-99), Kennedy (carrera 87 # 58-21), Ciudad Bolívar (carrera 17F # 69A- 32 Sur), Bosa (calle 69A Sur 92-47), un punto de atención en el Supercade de Engativá (transversal 113B # 66-51) y otro en la Terminal de Transporte de El Salitre (Diagonal 23 # 69A-55 Módulo 5).
Noticias relacionadas
El 9 de abril se conmemora el Día nacional de la memoria y solidaridad con las víctimas
08 Abril 2024Estados Unidos es el primer acompañante internacional del capítulo étnico del Acuerdo de Paz
04 Octubre 2022Otras noticias
El pasado jueves, desde la planta de tratamiento de aguas de Tibitoc, el alcalde Carlos Fernando Galán y Natasha Avendaño, gerente del Acueducto, anunciaron que el próximo sábado 21 de septiembre se hará un dictamen final para saber si se toman medidas más restrictivas de racionamiento en Bogotá o si la suspensión del servicio, por 24 horas, se mantiene cada día de por medio.
Cuando se habla de accidente laboral se piensa que les ocurre exclusivamente a las personas con oficios que podrían suponer un alto riesgo general: trabajadores de la construcción, por nombrar un ejemplo cotidiano, o deportistas de modalidades de velocidad y otras competencias que, en caso de no realizarse de la manera adecuada, se convierten en una calamidad para la integridad física, psicológica, social y económica.
En Canal Capital estuvimos con Alex Blanco, presidente de ETB, para hablar sobre el robo de cable de cobre en Bogotá.
En los últimos meses, la capital del país ha sido testigo de un alarmante incremento en el robo de cable de cobre, un crimen que afecta gravemente los servicios públicos y genera serias consecuencias para la ciudadanía.